La adopción tecnológica por parte de las ciudades ha ido aumentando en los últimos años. Las smart cities permiten proporcionar unos mejores servicios a los ciudadanos, optimizar los recursos y ahorrar dinero . Alcanzar esta mejora de calidad de vida no sería posible sin las TIC, ya que aseguran un desarrollo económico, social y ambientalmente sostenible. Por tanto, cabe destacar la importancia de la ciberseguridad para poder desarrollar ciudades inteligentes.
¿Qué significa smart city?
La definición del Parlamento Europeo de smart city es '' una ciudad que busca abordar las cuestiones públicas a través de soluciones basadas en las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC) sobre la base de una colaboración municipal con múltiples partes interesadas''.
¿Qué permite una ciudad inteligente?
Las ciudades inteligentes permiten la interactuación de los ciudadanos con la ciudad de forma multidisciplinar . Éstas se adaptan en tiempo real a sus necesidades, de manera eficiente; ofrecen datos abiertos, soluciones y servicios orientados a los ciudadanos; pueden resolver efectos de crecimiento de las ciudades, en ámbitos públicos y privados, gracias a la integración de infraestructuras con sistemas de gestión inteligente .
¿Cómo se estructura una smart city?
- Sensores y dispositivos conectados: Cuando hablamos de sensores y actuadores conectados, nos referimos a unos tipos de dispositivos inteligentes (meteorológicos, acústicos, de incendio, de contaminación, de alumbrado, tráfico…) que aportan información a partir de aplicaciones, donde incluso, los propios ciudadanos, pueden realizar la función de sensores y de actuadores.
- Conectividad y Red: Esta infraestructura complementa el Ancho de banda con redes capilares de corto alcance, que son de gran importancia para los objetos de Internet de las Cosas, formadas por puertas de enlace y concentradores, recopilando los datos de los sensores a partir de enlaces inalámbrica.
- Machine-to-Machine y Cloud Computing: Las plataformas M2M y de computación en la nube, nos dan la posibilidad de control de conexión, analizar y redirigir datos, garantizar la seguridad de las transacciones y que los proveedores puedan interactuar con las aplicaciones para crear nuevos servicios.
- Aplicaciones Verticales: Tienen la función de gestionar los servicios y objetos desplegados por la ciudad. Son las aplicaciones encargadas de las funciones anteriores, en las que los decisores supervisarán la información de los servicios representada en paneles de control.
La fragilidad de las Smart Cities
La integración de dispositivos tecnológicos en las ciudades, hace que aumente su vulnerabilidad frente a ciberataques, lo que nos obliga a integrar una ciberseguridad sólida en las futuras smart cities . Los sistemas están interconectados y gestionan mucha información, por tanto, las ciudades inteligentes, son un escenario atractivo para desarrollar operaciones maliciosas, donde un simple error en el sistema, puede desencadenar un impacto a gran escala .
La importancia de la ciberseguridad
La ciudad inteligente es una gran infraestructura interconectada que ofrece una serie de servicios. El auge de las TIC en este ámbito, hace que tengamos que tener en cuenta el desequilibrio entre la ''tecnología de las cosas'' y la ''tecnología de las personas'', las amenazas a la intimidad y el impacto de una violación en el sistema. Así pues, para que estas debilidades no se vean incrementadas, es necesaria una gran madurez en ciberseguridad, desde el momento de diseño de la ciudad .
Riesgos y amenazas de las smart city: Los riesgos y amenazas de las smart cities que no tienen una ciberseguridad sólida desde su diseño son:
- Grandes y complejas superficies de ataque
- Sistemas heredados inseguros
- Problemas de cifrado
- Ataques de denegación de servicios
- Problemas simples con gran impacto
- Carencia de equipos de respuesta y planes de emergencia contra ciberataques.
En definitiva, para el desarrollo de una smart city es importante el despliegue de la Internet de las Cosas, para dar vida a una ciudad hiperconectada, sin embargo, la recopilación de datos masivos comporta problemas de ciberseguridad y de privacidad .
Por tanto, las ciudades deben ser construidas alrededor de una ciberseguridad sólida desde su inicio , y no después de haber sido construida.
Artículo facilitado por Cloud Comunicaciones (miembro de la Comunitat 30Virtual), una compañía con más de 30 años de experiencia en la prestación de servicios y el desarrollo de soluciones a empresas. Posee una dilatada experiencia en el mundo de la ciberseguridad, de la mano de fabricantes líderes en el mercado. Realiza auditorías de seguridad para detectar los puntos débiles de la red y aconseja a las empresas de las medidas necesarias que deben adoptar. CloudCom es agente adherido al Programa Kit Digital.
Llegir notícia en català